Se lanza una nueva política de sistemas de gestión ambiental a través de dos Centros de Desarrollo Regional para asistir a los establecimientos de la Cuenca
Los Centros de Desarrollo Regional profundizan el acercamiento a las empresas iniciado por ACUMAR a través de la RAAC, y son llevados adelante juntamente con la Universidad Tecnológica Nacional y la Universidad Nacional Guillermo Brown
El jueves 24 de noviembre se realizó la reunión de lanzamiento del proyecto de desarrollo de una política de Sistemas de Gestión Ambiental para establecimientos ubicados en la Cuenca Matanza Riachuelo. Este encuentro, organizado por ACUMAR y la Red de Adecuación Ambiental de la Cuenca (RAAC), convocó a empresas y profesionales y estuvo destinado a compartir los proyectos y objetivos de la creación de los Centros de Desarrollo Regional (CDR), que brindarán asistencia a los establecimientos de la Cuenca para una correcta adecuación y gestión ambiental.
El encuentro fue en la sede del campus de la Facultad Regional Buenos Aires de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), en Villa Lugano, donde funcionará uno de los dos CDR; el otro se podrá en marcha a comienzos de diciembre en el Sector Industrial Planificado de Almirante Brown (SIPAB), en la localidad de Burzaco. Ambos centros serán desarrollados y llevados adelante conjuntamente por ACUMAR, la RAAC, la UTN y la Universidad Nacional Guillermo Brown (UNaB).
“Estos centros tienen el objetivo de fomentar una mirada amplia de la cuestión ambiental que va mucho más allá del aspecto normativo y de los parámetros exigidos a los establecimientos para no contaminar la Cuenca –explicó Bruno De Alto, director de Gestión Ambiental de ACUMAR y presidente de la RAAC–. Los Sistemas de Gestión Ambiental que promovemos toman a todo el proceso productivo como una unidad en términos de cánones sustentables y respetuosos del ambiente que puedan implementar todas las pequeñas y medianas empresas, con capacitación y asistencia y sin que les represente un enorme esfuerzo económico”. El proyecto incluye la asistencia técnica gratuita de los CDR a 24 empresas que decidan emprender sus procesos de adecuación ambiental y convertirse a una producción sustentable con un Sistema de Gestión Ambiental. “Más allá de eso, vamos a ofrecerle asistencia técnica especializada a todos los establecimientos que la necesiten, buscar nuevas fuentes de financiamiento para la gestión ambiental y conformar una comunidad de trabajo sobre este tema”, sostuvo De Alto, quien tuvo a cargo la apertura del encuentro tras las palabras de bienvenida de Lucía Reynoso, coordinadora de Vinculación de ACUMAR.
El decano de la Facultad Regional Buenos Aires de la UTN, Guillermo Oliveto, subrayó la importancia y la necesidad del trabajo conjunto entre las universidades, las empresas y el Estado en el marco de ACUMAR, para contribuir al cuidado y la creación de una nueva cultura ambiental en el sector productivo local. Una nueva forma de trabajo
En la reunión se presentaron los equipos de trabajo de los CDR, integrados por profesionales y expertos de ambas universidades. “Este proyecto que hoy estamos presentando en sociedad empezó hace muy poco, y está pensado en términos del triángulo virtuoso que debemos conformar las universidades, el Estado y las empresas para el desarrollo”, señaló el coordinador del programa de Sistemas de Gestión Ambiental, Guillermo Winnicki, quien agradeció especialmente la presencia de representantes de empresas en el encuentro.
“La sustentabilidad es una construcción colectiva, y entre las empresas, las universidades y el Estado tenemos que ir definiendo qué sustentabilidad queremos, porque es fácil definirla mediante un discurso, pero el desafío es que esa sustentabilidad ambiental se traduzca en desarrollo económico real con más puestos de trabajo”, resumió Sergio Nirich, de la Secretaría de Extensión Universitaria de la UTN, quien habló en el encuentro por parte del Rectorado de la Universidad.
“Comúnmente cuando se comparte algo hay que dividirlo, pero compartir proyectos como este es algo que verdaderamente multiplica”, dijo a su vez Ignacio Jawtuschenko, secretario de Extensión y Bienestar de la UNaB, quien resaltó la colaboración del Municipio de Almirante Brown y la Comisión Mixta del SUPAB en el desarrollo del CDR que funcionará en Burzaco.
La necesidad del compromiso en las empresas
Durante el encuentro se expusieron además algunas experiencias de establecimientos de la Cuenca en la adecuación y la gestión ambiental. “A nivel ambiental tenemos los riesgos de toda empresa química, y lo bueno de haber implementado un sistema de gestión ambiental es que nos ordenó, nos hizo estar más conscientes en temas de sostenibilidad y más tranquilos ante los organismos de control, no estamos temerosos sin saber en qué estamos mal”, sostuvo Guillermo Laborato, de la empresa Diransa, ubicada en el SIPAB.
“Para las empresas, la sustentabilidad ambiental no es un tema teórico, porque involucra la sustentabilidad laboral y la competitividad –sostuvo por su parte Jorge Aguirre, de Sinteplast–. Para esto es fundamental que el conocimiento fluya de la universidad hacia las empresas y de las empresas hacia la universidad, y que en las empresas haya liderazgo para promover la producción sustentable”.
“No podemos extrapolar experiencias ajenas: tenemos que pensar desde aquí –sostuvo Alejandro Faillace, dirigente de la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales por el Desarrollo Argentino (ENAC) e integrante del equipo técnico de los CDR–. Como empresarios creemos que las exportaciones son importantes, pero hay que salvaguardar el mercado interno, porque el futuro de la Argentina está en las pymes y con más trabajo argentino. Por eso, esta iniciativa es fundamental para que las pymes puedan adecuarse ambientalmente”.
De Alto y Winnicki resaltaron que, a través de esta nueva política, ACUMAR no abandona ni relaja su tarea de control y de fiscalización hacia las empresas, sino que justamente aporta nuevas herramientas para el trabajo conjunto en la solución de los problemas ambientales, de modo que en el propio proceso de adecuación los establecimientos puedan potenciar su competitividad.